Síntomas de alergia de los caballos
Hablemos de los síntomas de la alergia
¿Cómo reconocer los síntomas de la alergia?
El signo más común de una alergia es el picor en la piel, esto puede llevar a:
- Rascarse, morderse y frotarse de forma exagerada
- Pelos rotos y pérdida de cabello
- Bultos rojos o duros en la piel
- Urticaria
- Formación de heridas
- Engrosamiento de la piel
Los lugares habituales de picor son la región de la crin y la cola, la grupa, la cara, el cuello, los hombros y las patas. Los problemas de las vías respiratorias, la laminitis (por ejemplo, la sensibilidad en los pies) y los movimientos de la cabeza se asocian con menos frecuencia a la alergia.
Los síntomas pueden estar presentes durante todo el año o sólo durante una temporada determinada, dependiendo de qué alérgenos desencadenan la reacción. Los mosquitos que pican y el polen son estacionales, pero la alergia alimentaria está presente durante todo el año.
Hipersensibilidad a los insectos (alergia a los insectos)
Los síntomas de esta alergia son estacionales y se observan durante los meses más cálidos del año. Primero se notan picores, pelos rotos y costras en la región de la crin y la cola, que luego progresan hasta afectar la grupa. La cara, el cuello y los hombros también pueden verse afectados.
Atopia o dermatitis atópica (alergia a los alérgenos ambientales o alimentarios)
Los síntomas de la atopia se presentan en la cara, las piernas y el torso. Los caballos que son alérgicos a los alérgenos de interiores (por ejemplo, ácaros del polvo doméstico, ácaros de almacenamiento y hongos) muestran síntomas principalmente cuando están estabulados.
Los síntomas estacionales son causados por alérgenos de exterior, como el polen. En muchos casos, los caballos son alérgicos a más de uno de estos alérgenos.
También pueden presentar alergia a los alimentos
Si su caballo muestra alguno de estos síntomas, por favor contacte a su veterinario para un chequeo de alergia. Otras enfermedades pueden causar signos similares, por lo que su veterinario comenzará por excluir todas las demás causas potenciales, como parásitos e infecciones.
Si los síntomas permanecen después de excluir o tratar tales causas, el siguiente paso es excluir la posibilidad de una alergia alimentaria, y luego identificar qué alérgenos ambientales pueden ser los responsables.
Esto implica un análisis de sangre rápido y sencillo: el análisis de sangre NextEQuine.
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